TDM aumenta las tasas de detección del cáncer y reduce los rellamados

Investigadores de la Facultad de Medicina de Harvard (HMS; Boston, MA, EUA) y el Hospital Brigham and Women's (BWH; Boston, AM, EUA), realizaron un estudio que comparó el desempeño diagnóstico del cribado del cáncer de mama mediante mamografía digital de campo completo (FFDM), un entorno híbrido de FFDM y TDM, con únicamente la TDM. Se realizaron un total de 179.028 mamografías de cribado, compuestas de 41.818 (23,3%) con FFDM, 83.125 (46,4%) con exploraciones híbridas y 54.084 (30,2%) con únicamente la TDM.

Luego, los investigadores utilizaron los datos de las historias clínicas electrónicas (HCE) para extraer registros de informes y datos demográficos de las pacientes, un algoritmo de procesamiento del lenguaje natural para extraer la puntuación BI-RADS de cada informe y un registro institucional de cáncer para identificar los diagnósticos de cáncer. Los resultados mostraron que las tasas de detección de cáncer fueron 2,6 por 1.000 exámenes para la FFDM, 4,9 por 1.000 para los exámenes híbridos y de 6,0 por 1.000 para la TDM sola. Las tasas de recuperación fueron del 10,4% para la FFDM, del 10,6% para los exámenes híbridos y del 10,8% para los exámenes con TDM sola. El estudio fue publicado el 14 de febrero de 2020 en la revista Journal of the American College of Radiology.

“En comparación con la FFDM, la TDM mejora la detección del cáncer de mama en las mamografías de cribado, que se duplicó”, concluyeron la autora principal, Laila Cochon, MD, del Hospital Brigham and Women's y HMS, y sus colegas. “Aunque la tasa de rellamado general no cambió con la TDM en comparación con la FFDM, una mejora en el valor predictivo positivo para el número de cánceres por número de rellamados refleja, con el tiempo, una reducción en la necesidad de volver a llamar innecesariamente a las pacientes”.

La TDM captura varias imágenes en un rango angular limitado para producir un conjunto de imágenes reconstruidas, que luego se pueden ver individualmente o secuencialmente en un bucle de cine, y en una imagen 3D de la mama, que se puede ver en cortes estrechos, similar a las tomografías computarizadas. Mientras que en la mamografía 2D convencional, los tejidos superpuestos pueden enmascarar áreas sospechosas, las imágenes en 3D eliminan la superposición, haciendo que las anomalías sean más fáciles de reconocer. Se estima que la TDM en 3D reemplazará a la mamografía convencional dentro de diez años.

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Facultad de Medicina de Harvard
Hospital Brigham and Women's