Novedoso retractor hace que la cirugía laparoscópica sea asequible en todo el mundo

La tecnología quirúrgica a menudo se desarrolla para sistemas de atención médica con buenos recursos, y es de poca o ninguna utilidad en entornos más pobres donde los hospitales carecen de una infraestructura de apoyo sofisticada o de personal debidamente capacitado. Sin acceso a equipos médicos que puedan utilizar, los hospitales y las clínicas de los países de ingresos bajos a medios no pueden ofrecer tratamiento quirúrgico a nueve de cada 10 pacientes. Por lo tanto, el equipo médico que se puede fabricar a bajo costo, es simple de usar y se puede mantener fácilmente ayudará a extender la cirugía a los cinco mil millones de personas en todo el mundo que actualmente no pueden acceder a ella. Un equipo de investigación internacional ha diseñado ahora una herramienta quirúrgica simplificada para realizar cirugía laparoscópica, o cirugía mínimamente invasiva, en entornos de bajos recursos. El resultado es que la cirugía laparoscópica ahora se puede realizar en clínicas y hospitales donde antes no era posible.

La herramienta quirúrgica fue creada por un equipo de investigación dirigido por la Universidad de Leeds (West Yorkshire, Reino Unido) con un enfoque en la creación de dispositivos médicos específicamente para uso en países de ingresos bajos a medios. El equipo ha sido pionero en un enfoque de desarrollo basado en el "diseño participativo", en el que los usuarios de la tecnología participan estrechamente en su diseño, y en el que la funcionalidad del dispositivo se reduce a lo esencial. El diseño simplificado de la herramienta quirúrgica hizo que fuera más fácil para el fabricante del dispositivo obtener la aprobación regulatoria, siendo el tiempo que se tardó en pasar del diseño a la aprobación de cuatro años en este caso, en comparación con los 10 años que tarda en general. La herramienta quirúrgica también cumple con las pautas establecidas por la Organización Mundial de la Salud para el diseño y desarrollo de tecnología de atención médica para países de ingresos bajos a medios. Dice que deben seguir cuatro principios clave, las 4A: asequibilidad, accesibilidad, disponibilidad y adecuación.

Durante las operaciones laparoscópicas, el cirujano infla el abdomen del paciente con gas CO2 para crear espacio para poder ver los órganos internos y manipular los instrumentos. Eso tiene dos desafíos. Requiere que los quirófanos tengan un suministro confiable de gas CO2. También requiere que los músculos abdominales del paciente estén completamente relajados, lo que requiere anestesia general y un anestesista para administrarla. Se ha desarrollado un enfoque alternativo llamado laparoscopia sin gas. En lugar de bombear CO2 al abdomen, se usa un retractor mecánico o una abrazadera para levantar la pared abdominal. Con este método, el paciente no necesita anestesia general; en cambio, se administra anestesia espinal y no es necesario que esté presente un anestesista dedicado. Pero este enfoque alternativo no ha logrado ganar popularidad, en gran parte debido a los desafíos con el uso y mantenimiento de los retractores.

Los investigadores, en asociación con cirujanos y un fabricante de dispositivos médicos, diseñaron un nuevo retractor, asegurándose de que fuera adecuado para un entorno de atención médica de bajos recursos. Un cirujano manipula un pequeño anillo en el extremo del retractor utilizando técnicas de laparoscópia. Cuando está en su lugar, el dispositivo se opera manualmente para levantar suavemente la cavidad abdominal hacia arriba, creando el espacio necesario para que opere el equipo quirúrgico. Conocido como RAIS (retractor para cirugía sin insuflación abdominal), el innovador retractor pasó por cinco iteraciones de diseño antes de que se desarrollara y probara un prototipo. Durante una evaluación clínica, se utilizó en 12 operaciones laparoscópicas: en cuatro casos de apendicitis, dos histerectomías y seis casos en los que se extirpó la vesícula biliar. No hubo eventos adversos por el uso del retractor.

“La cirugía laparoscópica tiene beneficios para los pacientes. Las personas se recuperan más rápidamente y los riesgos de infección cruzada son menores”, dijo el Dr. Pete Culmer, profesor asociado de Tecnologías de la Salud en Leeds, quien supervisó la investigación. “Pero en muchas partes del mundo, las técnicas laparoscópicas no se usan mucho debido a la necesidad de equipos que no se pueden mantener fácilmente o dependen de una infraestructura compleja en el quirófano.

“Nos asociamos con médicos en la India para trabajar en el desarrollo de instrumentos que simplifiquen el proceso, con el objetivo de permitir que la cirugía laparoscópica esté disponible en más lugares del mundo”, agregó el Dr. Culmer.

“El mayor problema para los cirujanos rurales que necesitan realizar una cirugía laparoscópica es encontrar un anestesiólogo y el equipo para administrar anestesia general”, dijo el Dr. Jesudian Gnanaraj, un cirujano pionero en la cirugía laparoscópica sin gas y que trabajó extensamente en partes de la India rural donde la cirugía normalmente no ha estado disponible. “El dispositivo RAIS hace posible la cirugía laparoscópica, con costos más bajos y recursos fácilmente disponibles como la anestesia espinal”.

Enlaces relacionados:
Universidad de Leeds  

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